Innovación en educación infantil

La experiencia con la robótica educativa ha sido exitosa ya que los alumnos manifestaban un alto índice de motivación con esta práctica.

Inter-European December 11, 2019

Desarrollar experiencias educativas innovadoras en las aulas de educación infantil en relación con la integración de la fe ha sido uno de los sueños llevados a cabo en mi experiencia como educadora. Mi búsqueda con este tipo de actividades era ofrecer una metodología que rompiese con esquemas tradicionales de la práctica escolar y especialmente en la asignatura de Biblia.

Por esta razón introduje la robótica y el desarrollo de la inteligencia emocional en las actividades de religión. La experiencia con la robótica educativa ha sido exitosa ya que los alumnos manifestaban un alto índice de motivación con esta práctica. La robótica educativa les permitía participar de manera espontánea y los invitaba a explorar, a cultivar actitudes científicas, a integrarse con las Tics, a desarrollar las inteligencias múltiples, así como el aprendizaje basado en proyectos.

Como docentes, cambiar nuestros métodos de enseñanza permitirá emocionar a nuestros alumnos, ya que el cerebro que se emociona es el que aprende. He ahí la importancia de introducir proyectos y metodologías que contribuyan al desarrollo de la ciencia, y que además se implementen estrategias que permitan ampliar las habilidades y conocimiento para enfrentar los nuevos retos del siglo XXI, así como su integración con nuestra fe.

Tomemos por ejemplo un análasis de José del libro de Génesis. Las emociones formaron parte de su existencia, y en su recorrido vital encontramos muchas de ellas de forma intensa. Las emociones le ayudaron a prepararse para circunstancias relevantes. Le ayudaron a resolver problemas, a evitar conflictos, a pedir consejo y a prepararse para nuevas situaciones. Fueron básicas en las relaciones que estableció con los que lo rodeaban, sobre todo con su Dios Creador. Dios le ayudó a gestionar su inteligencia emocional, a desarrollar las habilidades necesarias para entenderse a sí mismo y a sus iguales. José aprendió a identificarlas, a medirlas y a regularlas.

El objetivo principal de esta actividad de análasis era desarrollar la conciencia emocional para que los alumnos pusieran nombre a lo que sentían y sienten otras personas. Además, ayuda a iniciarlos en la comprensión del significado de las ventajas o desventajas de las emociones, dependiendo de su intensidad.

La actividad comenzaba con la narración de la historia bíblica. El contexto utilizado era la asamblea. Para reforzar la comprensión del relato empleábamos videos, canciones y preguntas relacionadas con la historia y las emociones que se presentan. Por ejemplo, enfatizamos la intensidad de las emociones que presenta José cuando su padre le hace un gran regalo o cuando sus hermanos lo venden como esclavo. A través de este medio, trabajamos la emoción de la alegría y la tristeza, en su intensidad alta, normal y baja en el curso de tres años y a través de preguntas que se relacionaban con sus experiencias y contextos cercanos.

Para ello, usamos en el aula el robot Bee-bot y creamos una alfombra con la cara del personaje bíblico. Las tarjetas que introdujimos en las alfombras presentaban estados de alegría alta, medio o baja. El ejercicio consistía en que lo alumnos llevaran el robot según las preguntas planteadas por la profesora.

Esta experiencia docente ha sido enriquecedora, ya que los alumnos mostraron un alto interés por esta práctica educativa y su integración de la fe en el aprendizaje.

Author

María Ángeles Armenteros Cruz

María Ángeles, máster universitario en Intervención Psicológica en el Desarrollo y la Educación por la UNED, máster en Logopedia por la universidad de Valencia, Licenciada en psicopedagogía por la UOC. Profesora de educación Infantil en el Colegio Adventista de Sagunto. Sirviendo como profesora de educación infantil durante 21 años.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *